*A un costado del Parque Juárez de la capital, las figuras de la Fortaleza, Justicia, Prudencia y Templanza, forman parte del patrimonio histórico
Arantxa Arcos
Xalapa, Ver.- La identidad xalapeña la respiramos y vemos a diario en forma humana, a un costado del Parque Benito Juárez. Pocos las observan pero ellas se mantienen firmes a casi 45 años de ser instaladas para recordar que la capital cuenta con Fortaleza, Justicia, Prudencia y Templanza.
Las puedes acariciar o hasta captar en fotografía, solo bastará que gires tu rostro hacia el lado derecho, a unos pasos de la cochera de Palacio de Gobierno.
De día, de noche, bajo una densa neblina o un intenso sol de veracruzano, puedes observarlas por un minuto y recordar que son parte del patrimonio histórico de la ciudad de Xalapa.
Son virtudes de una ciudad, son tangibles y las observamos en formas humanas; la templanza, está representada por un hombre que sujeta a un brioso caballo, exhibiendo que modera los apetitos y las pasiones.
La prudencia está caracterizada por una mujer que con la mano derecha jala la oreja de un sátiro, para algunos historiadores es la viva imagen del desorden y la desvergüenza.
La tercera es la fortaleza que sostiene en sus manos un mazo y detrás él, a la altura de su rodilla izquierda, destaca la cabeza de un león que en conjunto representan la fuerza y el valor.
La última y no menos importante, la justicia que es humanizada con una figura de mujer quien sostiene en sus manos una espada, de la que cuelgan unas cadenas a su costado izquierdo.
Las gigantes esculturas permanecen intactas en el paseo del ayuntamiento, también conocido como Constitución y hoy llamado del Cronista de la Ciudad.
Tal vez, con un poco más de historia las admires con mayor interés, como si regresaras a la época del Porfiriato cuando llegaron o cuando en 1979 se unió la figura de la templanza a este recinto ubicado en el corazón de la capital del estado.
Admirarlas te recordará a la historia de abuelos que te contaron cómo ese lugar fue ocupado como huerta del convento de San Francisco.
Entre los recuerdos se anexa que en agosto de 1979, el entonces presidente municipal de Xalapa, Rubén Pabello Rojas las presentó públicamente con Carmen Romano de López Portillo y Teresita de Hernández Ochoa.
Su onomástico coincide con la inauguración de los edificios que hoy conocemos como el Ágora y la Biblioteca de la ciudad.
